Se publican en libros, revistas, páginas web (incluido esta), etc... Que nos dicen que para alcanzar cierto grado de felicidad o estar en paz con uno mismo, tenemos que vivir el momento presente, o sea, el aquí y el ahora, porque ya sabemos que el pasado y el futuro no existen.
Es fácil escribir o decir lo anterior, practicarlo no lo es tanto.
Lo ideal sería practicar algún curso de yoga o meditación, pero claro esto requiere de nuestro tiempo y dinero, ¡dos bienes escasos en nuestros días!.
Para los que no disponemos de dichos "bienes", os digo que se puede practicar en casi cualquier lugar, incluso rodeados de gente. El truco o la clave es, ser capaces de aquietar a nuestra mente "parlanchina" de los pensamientos constantes que fluyen por ella, ayudándonos de una respiración más o menos profunda.
Como he dicho antes, lo podemos realizar en por ejemplo; Cualquier transporte público o andando por la calle.
También nos ayuda escuchar alguna música que nos guste y nos "llegue" (musicoterapia), por supuesto nada de rock o heavy, muy buenos algunos temas pero para este que hoy trato no nos viene bien.
Bueno pues a lo que voy. Se pueden alcanzar momentos de paz y sosiego (como dirían en el Tibet), en casi cualquier lugar, ¡no tenemos excusa!.
Cuando lo practiquéis y se os escape una pequeña sonrisa teniendo delante vuestro a otro viajero de por ejemplo el autobús, ¡ahí! habréis encontrado el presente y un simple pero fuerte momento de felicidad, que con la práctica estos momentos cada vez serán mayores.
Un secreto; A mí me pasa algunas veces.
Es fácil escribir o decir lo anterior, practicarlo no lo es tanto.
Lo ideal sería practicar algún curso de yoga o meditación, pero claro esto requiere de nuestro tiempo y dinero, ¡dos bienes escasos en nuestros días!.
Para los que no disponemos de dichos "bienes", os digo que se puede practicar en casi cualquier lugar, incluso rodeados de gente. El truco o la clave es, ser capaces de aquietar a nuestra mente "parlanchina" de los pensamientos constantes que fluyen por ella, ayudándonos de una respiración más o menos profunda.
Como he dicho antes, lo podemos realizar en por ejemplo; Cualquier transporte público o andando por la calle.
También nos ayuda escuchar alguna música que nos guste y nos "llegue" (musicoterapia), por supuesto nada de rock o heavy, muy buenos algunos temas pero para este que hoy trato no nos viene bien.
Bueno pues a lo que voy. Se pueden alcanzar momentos de paz y sosiego (como dirían en el Tibet), en casi cualquier lugar, ¡no tenemos excusa!.
Cuando lo practiquéis y se os escape una pequeña sonrisa teniendo delante vuestro a otro viajero de por ejemplo el autobús, ¡ahí! habréis encontrado el presente y un simple pero fuerte momento de felicidad, que con la práctica estos momentos cada vez serán mayores.
Un secreto; A mí me pasa algunas veces.
Gracias. A ver si soy capaz de graduar esa respiración más o menos profunda...
ResponderEliminarGracias a tí por comentar.
ResponderEliminarSeguro que siendo constante,lograrás controlar la respiración.
Un saludo.
Manu.